Mientras en Casa Rosada las autoridades se desentienden de la situación de hambre y tiran la pelota en la responsabilidad individual, la Iglesia se metió para paliar la ausencia del Estado y poder brindar un plato de comida a quienes peor la están pasando.
En un hecho inédito hasta el momento, el arzobispo Jorge García Cuerva abrió anoche las puertas de la Catedral Metropolitana para que funcione a modo de comedor comunitario. Junto a la ayuda de otras parroquias, hogares y organizaciones sociales de la red solidaria, coordinaron una cena para más de 160 personas.
La administración porteña informó que en abril había más de 4 mil personas viviendo en la calle. El número refleja que en dos años se duplicó la cantidad de gente sin techo que sufre el hambre. Pero, de todas formas, algunas ONG y movimientos sociales advierten que los indicadores no son del todo precisos y que la masa damnificada podría ser aún mayor.
La Iglesia viene tomando posición política frente a una realidad cruda de crecimiento del hambre desde hace algunas semanas. El monseñor Jorge Lugones y el arzobispo sanjuanino, Jorge Lozano, criticaron el acopio de la comida del gobierno nacional. El propio Papa Francisco dijo que “ningún Gobierno puede exigir privaciones incompatibles con la dignidad humana”.
Las parroquias de los barrios populares también se organizan en la misma dirección. El miércoles 19 de junio, por ejemplo, se hará en La Matanza una misa de reconocimiento a todas las mujeres que sostienen las ollas populares que se erigen como estrategia principal para paliar contra el hambre en las zonas más afectadas.
Así lo vimos el lunes cuando los curas del Grupo en la Opción por los Pobres Rodolfo Viano, Nicolás y Francisco Paco Olveira, anunciaron que iniciarían una huelga de hambre si el Ministerio de Capital Humano, a cargo de Sandra Pettovello, no empieza a repartir, como le ordenó el juez federal Sebastián Casanello, las 5 mil toneladas de alimentos retenidas en los galpones de la localidad bonaerense de Villa Martelli y de la provincia de Tucumán.