En un esfuerzo por preservar el delicado equilibrio ambiental del sistema de Tandilia y la
transparencia en las consultas públicas, un grupo de ciudadanos nos unimos para expresar
nuestra profunda preocupación ante la propuesta de proyecto del Parque Eólico Abrojo Alto,
que involucra la instalación de 23 aerogeneradores con todas las obras implicadas. Este
proyecto se sitúa en una de las sierras más emblemáticas del Sistema de Tandilia, conocida
localmente como sierra La Peregrina, a pocos kilometros de Mar del Plata y cuyo acceso
incluye en su recorrida importantes atractivos turísticos como por ejemplo, la Laguna de los
Padres y el barrio Jardín Sierra de los Padres constituyendo una ruta escénica de gran belleza.
Su implementación conlleva una profunda modificación del paisaje de nuestras sierras,
alterando su fisonomía de forma permanente, y con ella nuestra identidad, al dañar de forma
irreversible el patrimonio natural y cultural, con gran potencial educativo, (eco)turístico y
recreativo de un área importante del Partido de General Pueyrredon.
A continuación, sintetizamos los principales argumentos y medidas propuestas:
Objeciones al proyecto:
- Impacto Ambiental: Las Sierras de Tandilia son uno de los últimos relictos en nuestro
territorio bonaerense que se destacan por su singular geología, biodiversidad y su
valioso acervo cultural, conformando un paisaje natural de gran valor escénico. La
alteración de este hábitat representa un riesgo para la biodiversidad local, generando
preocupación, dado que el paisaje natural ha sido alterado durante años y actualmente
el Sistema de Tandilia solo conserva un 1% de su área bajo alguna categoría de
protección. Recordamos que Argentina ha firmado pactos internacionales que
promueven un 30% de los ecosistemas protegidos para el 2030, objetivo que aún está
lejos de concretarse. Es importante por lo tanto señalar que el área propuesta limita
con una de las pocas reservas naturales existentes en la región, La Reserva Privada
Paititi, clasificada como un área valiosa para la conservación de los pastizales naturales
(AVP). Y no sólo limita, sino que la impacta directamente alterando su estado de
conservación y valor escénico haciendo pasar las torres y líneas de transporte por su
predio.
La construcción del parque no solo afectaría a la fauna y flora local, sino que además
conlleva extensos movimientos de suelo para erigir las bases de los aerogeneradores,
los caminos y la subestación transformadora. Este proceso podría traducirse en la
destrucción o deterioro de numerosos y valiosos sitios arqueológicos presentes en la
zona, afectando gravemente el rico patrimonio histórico y cultural de nuestra región.
La edificación de este parque podría también sentar un peligroso precedente para el
uso destructivo de estos entornos en otras sierras del sistema de Tandilia.
Estos lugares no sólo proporcionan beneficios ecosistémicos esenciales (e.j. recarga
del acuífero), sino que también ofrecen espacios importantes para la conexión entre el
pasado local, las personas y el resto del mundo natural. - El posible lado “b“ de las energías renovables: respaldamos y fomentamos la
transición energética, ya que constituye una herramienta fundamental para mitigar los
efectos del cambio climático. No obstante, como sociedad, aún no hemos resuelto por
completo la cuestión de dónde, cómo y cuándo ubicar este tipo de emprendimientos,
que bien planificados e intencionados son favorables y necesarios para la comunidad.
Pero no podemos dejar de resaltar que en nuestra búsqueda bienintencionada de
resolver un problema, podríamos inadvertidamente generar otro si no incluimos la
opinión de todos los actores sociales y evaluamos en profundidad los impactos
potenciales de su implementación. Por ejemplo, en otros países existen diversas
experiencias de daños ambientales registradas que causan las plantas eólicas. - Deficiencias en la instancia de participación ciudadana durante la evaluación de
impacto ambiental: Por último, y sumamente importante,ya que hace a la legalidad del
proyecto, consideramos que la propuesta del parque eólico implica una modificación
significativa del paisaje y no debería ser abordada por el desarrollador y la autoridad
competente, sin tener en cuenta la opinión de toda la comunidad.
El desarrollo de la propuesta, desde su divulgación hasta los plazos establecidos, ha
ocurrido de manera incorrecta, con nula o baja publicidad, y en un momento
inoportuno del año, circunscribiendo la participación ciudadana a una consulta en la
página web del Ministerio de Ambiente Bonaerense. El marco de participación
adecuada, en función de los alcances del proyecto, es la audiencia pública, fijada con la
debida anticipación, previa puesta a disposición de la comunidad de la información
pública ambiental, en formato claro y accesible, para que la autoridad competente
pueda acceder a la opinión de la sociedad del Partido de General Pueyrredón, y en
particular, de los vecinos de la zona que podría verse afectada por el proyecto.
Insistimos que la instancia de participación debe de estar a la altura de la envergadura
del proyecto y sus implicancias para la sociedad. Esto nos plantea inquietudes sobre la
transparencia y accesibilidad del proceso de consulta hasta aquí desarrollado, ante una
propuesta de obra trascendental para la comunidad de Mar del Plata y áreas
circundantes.
A manera de ejemplo, la Universidad Nacional de Mar del Plata cuenta con numerosos
y prestigiosos profesionales que no han sido consultados ni podrán, dadas las
circunstancias expuestas, aportar su conocimiento en tiempo oportuno respecto del
sistema serrano sobre el que trabajan hace décadas. Estos profesionales enfatizan la
importancia de realizar un análisis exhaustivo para comprender completamente las
implicancias a corto, mediano y largo plazo del proyecto.
Finalmente, consideramos que esta propuesta constituye una etapa más del ciclo de
degradación del paisaje serrano que ha estado en marcha durante muchos años, impulsado
principalmente por actividades productivas no sostenibles. Al tratarse en su mayoría de un
espacio de dominio privado, la falta de acceso público ha limitado el uso social responsable del
paisaje serrano e interacciones de la sociedad con la naturaleza. Es de necios no reconocer que
el escenario paisajístico de estas sierras, desempeña un papel fundamental en la calidad de
vida de los ciudadanos del Partido de General Pueyrredon y zonas aledañas. Este rol se
evidenció claramente durante la pandemia de COVID-19 y en la demanda creciente de las
actividades de turismo y deporte en la naturaleza. Permitir este proyecto sin escuchar la
opinión de la comunidad implicaría ignorar una elección de vida por parte de los habitantes
de Mar del Plata y sus visitantes.
Ante lo expuesto solicitamos aplicar inmediatas medidas preventivas y precautorias.
Especialmente, la suspensión temporal de los plazos de consulta pública del proyecto hasta
que se realice una revisión completa y genuina del estudio de impacto ambiental por parte de
la sociedad. Es vital otorgar un tiempo prudencial para que la sociedad acceda a la
información, y luego opine fundadamente sobre el proyecto, garantizando así una toma de
decisiones informada, democrática y ajustada a derecho. La modificación irreversible del
paisaje a esta escala no debería estar solo en manos de una iniciativa privada, acompañada
solo por un mero trámite formal ante el Estado. La comunidad debe ser protagonista en la
elección de su modelo de desarrollo.
Sin embargo, ante la urgencia de la situación invitamos a todos los ciudadanos interesados a
dejar su opinión antes del 5 de enero en el siguiente link:
https://participacionpublica.ambiente.gba.gob.ar/participacion/resumen/Parque-E%C3
%B3lico-Abrojo-Alto
no olvidar incluir firma y dirección de contacto
En definitiva, instamos a las autoridades competentes a considerar estos argumentos, y
adoptar en consecuencia, medidas preventivas y precautorias urgentes para garantizar la
preservación del sistema de Tandilia, en particular, el sitio en el que se pretende emplazar el
parque eólico en cuestión. Nos oponemos de forma contundente a cualquier tipo de
desarrollo no sostenible que degrade el ambiente, atente contra la diversidad biológica, la
integridad del ecosistema local, los servicios ecosistémicos, la conservación del patrimonio
arqueológico y la calidad escénica del paisaje, objetivos que deben estar incorporados a ésta
y cualquier otra propuesta de desarrollo que impacte significativamente en el territorio
serrano.
Foto 1: Arte Rupestre. Alero Raquel, Sierra La Peregrina. Gentileza: Diana Mazzanti.
Foto 2. Atardecer en La Peregrina. Gentileza Fernanda Alvarez.
Foto 3. Vista panorámica de las sierras. Gentileza Lia Montti
Foto 4. Actividades turístico sociales y/o educativas como el avistamiento de aves. Gentileza:
Lia Montti
Foto 5. Actividades recreativas y deportivas como vuelos en parapente y escalada. Gentileza:
Esteban Degregori.
Foto 6. Grindelia peregrinensis nueva especie descripta recientemente en sierra La Peregrina y
por la cual lleva su nombre. Gentileza: Malena Sabatino.
Foto 7. Educación ambiental en las sierras. Gentileza: Agustina López.