En medio de la incertidumbre a partir de la decisión del Gobierno Nacional de cerrar más de 50 centros de referencia en todo el país, hablamos con Patricia Coronel, trabajadora del Ministerio de Desarrollo Social de Nación y delegada de ATE.
La incertidumbre está en todas las oficinas del Estado, y las comunicaciones oficiales llegan por Twitter, por lo que nadie sabe cual será el futuro para los trabajadores que siguen sosteniendo la oficina del CDR en el Unzué: “No sabemos nada, más de la comunicación que dieron por twitter (X) no sabemos nada, no recibimos ninguna notificación, tenemos los mails oficiales habilitados y no llegó nada, aparte de que no hay ningún subsecretario nombrado y no sabemos a quien reclamarle” afirma Patricia, y agrega: “Podemos entrar normalmente pero creemos que eso tiene que ver con la indiferencia que tienen con el pueblo trabajador. Juntamos plata para poder hacer un juego de llaves”.
La justificación por parte del Gobierno Nacional, para el vaciamiento de los Centros de Referencia (al igual que de Telam, AYSA y otros estamentos del Estado) es que no funcionan, que acumulan militantes y que nadie va a trabajar. A partir del comunicado de cierre del CDR, que fue por fuentes extraoficiales, los y las trabajadoras siguieron cumpliendo su horario de trabajo: “Cuando venían los vecinos (más de 100 personas por día) nos tomamos el trabajo de explicarle que no teníamos autoridades, la mayoría de la gente lo tomaba a bien, pero no podíamos dar respuesta”.
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