El club LGTBIQ+ de Mar del Plata “Lobos Marinos” convoca al primer encuentro de adulteces diversas, un espacio pensado para compartir experiencias, generar vínculos y disfrutar de una jornada inclusiva y relajada el sábado 21 de diciembre, a las 16:00 horas en Plaza Pueyrredón (Av. Libertad y Calle 20 de Septiembre).
María Lidia, integrante del club y una de las impulsoras de esta nueva propuesta, cuenta: “Es importante crear espacios para adulteces mayores de 50 años dentro de la comunidad LGTBIQ+, y más aún si viene de un espacio amplio como el club Lobos Marinos. Hay muchas personas que están solas y que por la edad, y por haber pasado cosas durísimas como la represión durante el terrorismo de estado que llevó a que mucha gente tenga que ocultar o no poder vivir libremente su identidad, o perdió a su familia”.
El encuentro comenzará con una mateada comunitaria al aire libre, ideal para compartir una merienda en un ambiente de camaradería. Además, quienes asistan podrán participar de una muestra de Taichi, una propuesta para conectar con el cuerpo, relajarse y disfrutar del momento.
La actividad es gratuita y abierta a todas las personas que deseen sumarse. Está pensado para personas de más de 50 años, que pertenecen al colectivo LGTBIQ, y tienen ganas de vincularse con pares. Se recomienda llevar una manta, reposera o silla, así como también merienda para compartir en una canasta comunitaria.
“Por suerte ahora las cosas cambiaron, y las juventudes lo viven más libremente, pero antes era muy difícil. En nuestra generación hay mucha gente que se casó en una pareja heterosexual porque parecía no haber opciones. Gente que recién de grande pudo vivir su deseo. Este es un espacio seguro, libre, donde poder compartir nuestra historia, hacer actividades deportivas, sociales, culturales, lo que queramos hacer” explica María Lidia.
Este encuentro busca celebrar la diversidad, generar espacios de encuentro para las adulteces LGTBIQ+ y fortalecer los lazos dentro de una comunidad que valora el respeto, la inclusión y el compañerismo.
“Muchos somos jubilados y tenemos mucho tiempo. Ofrecemos este nuevo espacio para encontrarnos y seguir el camino que tenemos de acá adelante pero en compañía. Hay mucha gente que está sola. Eso se nota en las fiestas, gente que enviudó, que no tiene familia, desde el club queremos abrir este espacio para acompañarnos”, reflexiona la referente.
Sobre Lobos Marinos
El club, nacido en el año 2018 como un equipo de futbol gay, surgió para ofrecer un espacio seguro en la práctica deportiva para las disidencias sexuales. Con el tiempo, se sumaron otras identidades de la diversidad, y se consolidó el espacio de fútbol lésbico.
Frente al machismo del futbol tradicional, Lobos Marinos se propuso seguir el ejemplo de clubes de la diversidad que crecen en todo el mundo para fomentar el deporte inclusivo y libre de estereotipos y prejuicios.
Con el paso de los años, el club fue creciendo e incorporando otros deportes (Padel, Natación, Voley, y Yoga) y actividades culturales, como el cine bar queer, las clases de Salsa, y la fiesta Loba. En 2024 se constituyó como Asociación Civil, y obtuvo una distinción del Honorable Concejo Deliberante del Partido de General Pueyrredón.