La ola de violencia iniciada comenzó con las muertes de Héctor Raúl Figueroa y Diego Alejandro Celentano, dos taxistas asesinados durante las madrugadas del martes y miércoles bajo una modalidad similar: ambos recibieron pedidos de viajes vía Whatsapp y se presume que fueron emboscados por pasajeros o sicarios que los esperaban en el punto de encuentro del viaje. Los peritajes determinaron que en ambos casos se utilizó la misma arma, así como también balas pertenecientes a la policía provincial. Los asesinatos generaron el malestar de los gremios taxistas que iniciaron una medida de fuerza que contempló fuertes reclamos frente al Concejo Municipal de Rosario y obligó a suspender el acto de inauguración del año legislativo previsto para este jueves. El viernes por la mañana los trabajadores decidieron restablecer el servicio.
Pero el jueves por la noche continuó con una seguidilla de hechos que encendieron las alarmas en los distintos niveles del Estado. Cerca de las 19, un chofer de la línea K fue baleado por un joven que frenó el colectivo en Mendoza y México, con intenciones de subirse. La víctima fue trasladada de urgencia al Hospital de Emergencia Clemente Álvarez (HECA) donde se encuentra en estado delicado, peleando por su vida. La ola de ataques continuó con dos hechos más. Apenas unas horas después, y casi en simultáneo, incendiaron un taxi en Pasco y Liniers, y balearon la comisaría 15 de Sarmiento y Ameghino. En estos últimos casos no se registraron personas heridas.
La situación demandó una reunión de emergencia en el OJO, la central de procesamiento de información para la prevención del delito. Durante la noche del jueves el gobernador convocó a un comité de crisis del que participaron funcionarios locales, provinciales y nacionales, así como también autoridades del Ministerio Público de la Acusación (MPA) para definir las acciones a seguir. Al mismo tiempo, le pidió a Bullrich que convoque al comité de crisis nacional.
En paralelo, el fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos, Patricio Saldutti, dispuso una serie de allanamientos que fueron efectuados durante la madrugada por la Policía de Investigaciones (PDI) con resultados positivos.
En total fueron cinco allanamientos en el marco de las causas que investigan los homicidios de los taxistas. Además, el Comando Radioeléctrico demoró a seis personas acusadas de arrojar armas y municiones al patio de un vecino durante el procedimiento.
Y en la mañana del viernes, Cococcioni convocó a una conferencia de prensa donde brindó detalles de las medidas en las que el gobierno busca avanzar. Allí aseguró que vienen trabajando “codo a codo” con la Fiscalía para realizar las acciones investigativas correspondientes e intentar dar con los autores de los diversos hechos. Señaló que no descartan ninguna hipótesis y adelantó que se van a adoptar todas las medidas de refuerzo de seguridad urbana que estén al alcance del gobierno provincial, coordinando en conjunto con las fuerzas federales.
El gobierno envía fuerzas de seguridad y armadas a Rosario ante los cuatro asesinatos mafiosos vinculados con el narcotráfico que sucedieron durante la última semana. Este domingo falleció el colectivo que había sido baleado el jueves mientras que en la madrugada del sábado fue ejecutado por un sicario un trabajador de 25 años de una estación de servicio. A esos hechos se suma el asesinato de dos taxistas y la balacera contra una cárcel de la ciudad que ocurrió anoche.
En la estación de servicio donde mataron al playero dejaron un cartel que decía que “esta guerra no es por el territorio sino contra el gobernador Maximiliano Pullaro y el ministro de Seguridad Pablo Cococcioni”. Los firmantes prometieron en el texto que matarían “más inocentes” si no se respetaban sus derechos en las cárceles, como por ejemplo ver a sus hijos y familiares. Otro cartel colgado en uno de los puentes de la Circunvalación de Rosario advertía que las víctimas serían colectiveros, taxistas, basureros y comerciantes.
Ante esta situación, el gobierno provincial ofreció una recompensa de 10 millones de pesos a cambio de información sobre el crimen del playero. Cococcioni dijo esta mañana que no habrá marcha atrás con la política de rigor para los narcos detenidos
Mientras tanto, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y el ministro de Defensa, Luis Petri, llegan a Rosario para coordinar el trabajo de las fuerzas federales y armadas que reforzarán la ciudad para apoyo logístico ya que lq ley actual de defensa interior no permite otra tipo de intervención.
“Vamos con toda la fuerza, con toda la decisión, con los medios que tenemos a disposición”, expresó Bullrich esta mañana en conferencia de prensa.
Bullrich criticó a la gestión anterior en materia de seguridad: “Vamos a tener que mejorar nuestras fuerzas de seguridad, la Gendarmería, la Prefectura, la Policía, la Policía de Seguridad Aeroportuaria, porque la hemos recibido con medios muy deteriorados. No tenemos autos, helicópteros”.
Ayer hubo cacerolazos en el centro y otras zonas de la ciudad. Este lunes los docentes cumplen con una jornada de paro ante el temor de que los crímenes prometidos alcancen a trabajadores de la educación. Por el mismo motivo pararon desde anoche hasta hoy al mediodía los recolectores de residuos. Mientras tanto continúa el paro de colectivos que comenzó el jueves luego del ataque al chofer, y tampoco hay servicio nocturno de taxis.La Asociación Médica decidió un cese de actividades en hospitales y centros de salud. Ayer hubo paro de los trabajadores de las estaciones de servicios, que por tiempo indeterminado no atenderán al público entre las 22 y las 6 de la mañana del día siguiente.
Desde un comunicado oficial explicaron que la Gendarmería Nacional, la Policía Federal, la Prefectura Naval, la Policía de Seguridad Aeroportuaria y el Servicio Penitenciario asistirán a la Policía de Santa Fe en la lucha contra las bandas dedicadas al narcotráfico.